(Democracy Now!) – En la localidad estadounidense de East Palestine, estado de Ohio, datos recientemente publicados muestran que el suelo alrededor del sitio donde a principios de febrero se produjo el descarrilamiento del tren de Norfolk Southern contiene niveles de dioxina cientos de veces superiores a lo que se considera seguro.
Según el periódico The Guardian, los datos han sido revisados por exfuncionarios de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos y otros expertos en sustancias químicas, quienes dijeron que las dioxinas encontradas en East Palestine son sumamente preocupantes, aunque estén por debajo del límite que establece la normativa federal de limpieza al respecto.
Los hallazgos también contradicen las afirmaciones de la Agencia de Protección Ambiental, que la semana pasada le comunicó al Congreso que los niveles de dioxina eran “muy bajos”.
En 2010, cuando la Agencia de Protección Ambiental concluyó que las dioxinas presentan riesgos de contraer cáncer, la agencia trató de reducir el límite de los niveles de dioxina permitidos, pero el Gobierno del expresidente Obama mantuvo el límite en su lugar.
En noticias relacionadas, dos trenes operados por la compañía ferroviaria BNSF descarrilaron este jueves en los estados de Arizona y Washington.
En el accidente ocurrido en Washington, varios equipos de limpieza tuvieron que ser desplegados después de que se filtraran unos 20,000 litros de combustible en la reserva indígena de Swinomish.