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(San Juan, Puerto Rico) – La mañana del sábado 16 de agosto, la oficina de San Juan del Servicio Nacional de Meteorología (SJNWS por sus siglas en inglés) advirtió de resacas fuertes y alto riesgo de corrientes marinas con olas rompiendo en la orilla de 10 a 14 pies, como posibles consecuencias del paso del poderoso huracán Erin al norte de Puerto Rico.

¿Cómo el paso del huracán Erin al norte de Puerto Rico puede afectar comunidades costeras en el archipiélago? ¿Cuáles son las más vulnerables, y qué zona puede amortiguar mejor el impacto? 

De una población total de 3.2 millones de habitantes (en el momento de la declaración de emergencia por erosión costera en 2023), cerca de 2.13 millones residen en áreas costeras del archipiélago de Puerto Rico.  

De este grupo, más del 20% (unas 426,000 personas) vive en zonas de alto riesgo de inundaciones debido a la erosión y el cambio climático

La alta concentración poblacional en las costas exacerbó los impactos de fenómenos como el huracán María (2017), que aceleró la erosión del 40% de las playas puertorriqueñas.

Ante el paso del huracán Erin al norte de Puerto Rico, ya categoría 5 al momento de redactar este reportaje, personas expertas advierten que los sectores más vulnerables y donde puede haber más erosión costera, son (ordenados por Marea Ecologista por zonas de mayor a ‘menos’ impacto en relación a su vulnerabilidad) 

1. Loíza. El histórico barrio de Piñones, sectores como parcelas Suárez, Villa Cristiana y Villas del Mar, donde ya hay playas a punto de desaparecer y el municipio tomó medidas desesperadas como crear gaviones con piedras, tal es el caso de parcelas Suárez y Villa Cristiana. 

2. Arecibo. Estarían en riesgo, los barrios Obrero, Pueblo y el sector Jarealito, en el barrio Islote. Habrá que observar cómo se comporta la lluvia ya que, según SJNWS, caerán de 2 a 4 pulgadas de lluvia y hasta 5 en sectores aislados. 

Las inundaciones del río Grande de Arecibo y sus afluentes pueden juntarse con las olas rompientes, que pueden superar 10 pies, y afectar con inundaciones el centro histórico de esta ciudad que en los últimos años y con mucho esfuerzo local se ha convertido en un centro gastronómico y cultural. 

3. Playas en centro de Aguadilla y Aguada. La erosión costera también puede impactar las playas del centro urbano de Aguadilla, Tamarindo y todo el malecón, áreas en las que hay mucha actividad económica relacionada a la gastronomía y el entretenimiento así como el barrio Espinar, en Aguada, que colinda con este sector, donde también desemboca en río Culebrinas, que suele salirse de su cauce ante lluvias copiosas. 

Habrá que ver cuánto podrá aguantar el pantano Espinar y el caño Madre Vieja, lugares que las comunidades vecinas piden que declaren reserva natural hace más de cinco años.

4. La Boca. Barceloneta. También comunidades en torno a la playa de Puerto Nuevo, y Vega Baja son otros sectores que pueden estar en riesgo. 

Será la Reserva Natural Pantano del Río Cibuco y la recién creada Reserva Natural Jardines Submarinos de Vega Baja y Manatí, quienes darán una histórica resistencia al mal tiempo que puede azotar el norte del archipiélago. 

5. Sectores costeros pudientes de Carolina y San Juan. Puede ocurrir erosión costera severa en la colindancia de estos municipios, en sectores de Isla Verde y Punta Las Marías, así como en las playas La Concha y el acantilado de la playa de El Escambrón, cuyo paseo lineal tiene áreas inútiles tras un millonario desarrollo e inversión, muy cuestionado entonces por grupos culturales y comunitarios. 

También, en la urbanización Ocean Park puede haber gran impacto, donde todos los años desaparecen áreas de playa debido a la erosión, así como en el sector turístico de El Condado. 

Marejada del 9 de diciembre del 2022, video por Marcos Pérez Ramírez

Allí persiste un problema con las bombas de aguas usadas y de escorrentías que maneja el Departamento de Recursos Naturales (DRNA), ya que no funcionan consistentemente, cuya consecuencia son aguas sanitarias sin tratar que terminan descargadas al Océano Atlántico, frente a hoteles y residencias de ultra lujo.  

De otra parte, el sector playa Machuca, en Manatí está en las advertencias meteorológicas, sin embargo será una de las zonas donde se amortiguará el impacto ya que dicha playa es parte de la Reserva Natural, Hacienda La Esperanza, donde no hay vidas humanas y propiedades en riesgo inminente.

Por Marcos Pérez Ramírez

Periodista y editor fundador